Consejos dietéticos

En esta sección encontrarás información interesante sobre como cuidar nuestro cuerpo a traves de lo que comemos. 

Lo más esencial de comprender es que nuestro cuerpo físico está hecho de lo que comemos.

Los alimentos se componen básicamente de hidratos de carbono, que nos da sobre todo la energía que necesitamos, proteínas, que constituyen la parte sólida de nuestro cuerpo, grasas, que participan en todo el metabolismo, minerales, vitaminas, oligoelementos, agua y aire.

Nuestro cuerpo es una máquina adaptada a la vida y con mecanismos arquetípicos de adaptación. Además tiene un proceso vital que requiere de diferentes nutrientes y cantidades dependiendo del momento de la vida.

Fuera de dogmas o de tendencias extremas, creemos que lo natural y sencillo es lo mejor, y que cualquier cosa que nuestro cuerpo digiera y tenga que convertir en materia básica para la supervivencia tiene que ser sencilla en su presentación y en su digestión, pues así el sistema digestivo, encargado de llevar los nutrientes a la sangre y esta a las células, realiza mejor su función.

No olvidemos que el sistema digestivo es un tubo ciertamente largo para la medida de un cuerpo humano, que comienza en los labios y que acaba en el ano. La materia que constituirá nuestras futuras células surgirá de aquello que nos ponemos en la boca, de cómo masticamos esta sustancia y también de cómo la convierten en sus últimos constituyentes el estómago, los ácidos y enzimas que segregamos para ello. Después, el hígado tiene que hacer el esfuerzo de llevar todo esto a la sangre.

Así pues, para tener un cuerpo sano con posibilidades de vivir muchos años con energía y buena salud, es importante cuidar todo el tubo digestivo y tener conciencia de cómo asimilamos los alimentos. Por lo tanto los dientes han de poder masticar y hemos de hacerlo, el estómago tiene que tener las paredes intactas, el hígado ha de estar limpio, etc. Para tener salud es importante tener un sistema digestivo sano y si no lo está es primordial curarlo.

También cuando comemos nos hemos de ir dando cuenta de qué sienta bien y de qué no, sin juzgar si es bueno o malo por lo que pensamos o parece, sino darnos cuenta realmente de cómo nos sienta cada alimento.

Lo que no nos sienta bien obviamente quiere decir que nuestro cuerpo no lo quiere.

Aprender a comer tiene que ver con la calidad de los alimentos que ingerimos, su procedencia, la “vida” que tienen, la armonía en su combinación y las horas de digestión necesarias en función de nuestra forma de vida y metabolismo.

 Ahora escoge la dieta que mejor se adapta a tu momento.